1. MICA
Padilla 601
De alguna forma, la verdulería que me dio la bienvenida al barrio. Dos meses después de mudarme y de buscar la cama que quería, uno de los dueños de MICA, pasó casualmente por la puerta de mi edificio en el momento en que el fletero se negaba a subirla, no sólo la cargó hasta al ascensor, si no hasta mi departamento. Ese espíritu de generosidad y buena onda es lo que destaca a esta verdulería. También las novelas de la tarde en su televisor. Por todo esto les prometí fidelidad.
2. VERDE NUEVO
Gurruchaga 302
Un vivero que se siente cálido porque lo atiende su dueño Jorge, un señor amable que si no tiene lo que buscás te lo consigue y responde todas tus dudas, mientras te cuenta las aventuras de su perro. Me suele salvar en los apuros con la jardinería, siempre sonriente. El año pasado fue sede de “Enroque”, el intercambio entre artistes y comerciantes del barrio para difundir sus obras, en el vivero expuso su serie -Maleza- Fabián Nonino.
3. ANGELITO
Camargo 490
Un clásico del barrio, con comida caserita y buenos precios. Soy habitué y ahí me siento como en casa. Su gente es súper copada. La decoración es un mix de elementos kitsch y fotos de sus dueños con distintas personalidades y personas que desconozco, algunas camisetas de fútbol y mi objeto favorito: un angelito iluminado con una luz de neón. Recomiendo la tortilla de papas.
4. 878 BAR
Thames 878
Un bar a puertas cerradas que conozco desde mucho antes de pertenecer al barrio. Es mi elegido siempre que quiero tomar un rico cocktail y sentir que me traslado a los años 50. Llegar, pedir un old fashioned y sentarte ahí, te traslada a un set de Mad Men. Suelen seleccionar buenos djs para musicalizar sus noches y la gente de la barra se copa si sugerís alguna modificación en tu copa.
5. CASA BRANDON
Luis María Drago 236
Con sede física en el barrio hace más de 10 años. Desde que soy vecina es mi lugar elegido cuando tengo ganas de salir y no tengo plan, porque todas sus propuestas son interesantes. Desde ciclos de poesía, a shows en vivo o proyecciones. Todo esto sumado a la comodidad de la casita que une siente propia, buenos precios, cultura y amor queer.
*Lola Masip trabaja en medios audiovisuales como vestuarista y maquilladora, canta, hace canciones y saca fotos desde niña. Nació en Palermo y vivió en Villa Urquiza, Villa del Parque y Núñez antes de llegar al barrio. Vive en Padilla y Gurruchaga.
Foto: Sabrina Parel - @iamlightmaniac -