POR CLARA MUSCHIETTI, poeta y fotógrafa. Vive en Aráoz y Velasco.
Scalabrini Ortiz desde Corrientes hasta Córdoba
Poblada de negocios, algunos nuevos y otros históricos como la lencería ubicada al 454 (al lado del número dice Canning, antiguo nombre de Scalabrini Ortiz) conserva carteles que dicen "guardapolvos todo el año" y prendas de vestir que tienen varias décadas, igual que los curiosos maniquíes que están en la entrada. De este mismo estilo es la librería que está en la esquina de Jufré, con juguetes y artículos de librería de otras épocas. Estas cuadras tienen un encanto único.
La rosa de Villa Crespo
Aguirre 441
Es una panadería de barrio, su local sencillo no llama la atención desde afuera. Todos los productos son de muy buena calidad. Mención aparte para los chipá, los más ricos del barrio y más también. También se destacan el bizcochuelo marmolado (como hecho en casa) y la clásica torta de ricota.
Librería Mi casa
Como su nombre lo indica esta peculiar librería está situada en una casa, más precisamente es un lindo PH de la calle Malabia. Esta no es su única particularidad, se consiguen libros que no están en otras librerías y una nutrida sección de poesía.
Almacén natural y fresco
Velasco 472
En este local funciona una despensa de alimentos naturales y orgánicos,huevos, pollo, quesos de cabra. Mis favoritas son las hamburguesas de hongos portobello. También hay comida muy rica para llevar o comer ahí y a todo esto hay que sumarle la cálida atención de Agustina.
Plaza de Gurruchuga
Gurruchaga 1040
Este es un lugar del barrio al que empecé a valorar después de tener un hijo. Ahora es parte de mi día a día. Es ideal para los más chicos, ya que es pequeña y cerrada y pueden correr libremente. En verano es más hermosa (como casi todo). Hemos estado hasta tarde jugando con agua. A veces se festejan cumpleaños bajo el frondoso gomero.